Clásicos del Ajedrez: El romanticismo de Adolf Anderssen

El principiante de Ajedrez es como el espectador de un Arte que ve por primera vez un cuadro hermoso, o el descubridor reciente de una rica melodía en un poema sinfónico. El neófito repite las partidas famosas ricas en combinaciones imaginativas, sorprendentes ataques y sacrificios.

Los maestros de la Era Romántica desarrollaron sobre el tablero sus fértiles imaginaciones y produjeron Gambitos, ataques de mate y brillantes sacrificios. Esta extraordinaria etapa dentro de la evolución de la Teoría del del Juego Ciencia fue llevada a su cumbre de gloria por el maestro alemán Adolf Anderssen (1819-79)

Este ajedrecista nos dejó muchas partidas de insuperable belleza, entre ellas la que a continuación mostramos y que se conoce con el nombre de la Siempreviva.

1.e4 e5 2.Cf3 Cc6 3.Ac4 Ac5 4.b4

Esta jugada se denomina Gambito Evans y se puso en práctica en 1832, sin suponer la trascendencia que algún día tendría en la teoría del Ajedrez. Se trata de un sacrificio de peón que tiene por objeto ganar tiempo en el desarrollo.

Las negras devuelven el peón sin favorecer el desarrollo del blanco.

Las blancas tienen dos peones de menos, pero mejor coordinación de sus piezas. En busca, de desarrollar el Alfil Dama las negras entregan un peón a la vez que buscan una contraofensiva.

En este momento se inicia una de las combinaciones más extraordinarias que registra la historia del Ajedrez.

17.Cf6+ gxf6 18.exf6 Tg8

Las negras amenazan Dxf3 sin embargo el blanco realiza una finísima y tranquila jugada.

La segunda sorpresa. Ahora las blancas sacrifican la dama para poder dar un mate tan bonito como original.

Nelson Pinal Borges, MI

Santo Domingo